Conocemos muchas frases hechas sobre la música: “que amansa las fieras”, “la música es la banda sonora de la vida”, la vida sin música sería un error, etc.
Podemos agregar una nueva: “alegra el alma durante una pandemia”.
Y eso es lo que ha ocurrido en numerosos rincones de España. Hemos visto y escuchado a través de los distintos medios a gente cantando, tocando o bailando; solos o en familia, grupos de amigos, vecinos, compañeros de estudios, bandas y orquestas en grabaciones multipantalla etc.
El poder de la música ha servido para controlar diferentes emociones. Una verdadera terapia musical que ha conseguido relajar a muchísimas personas en la medida que escuchaban o interpretaban melodías conocidas y populares.
Desde la calle Cervantes, y durante varios días, a las 8 en punto de la tarde, los vecinos Jesús Herrera, Isabel Jiménez, Saúl e Isabel López Villalta, Carmen y Vicente Jiménez, Isidoro Rodríguez y Amparo Cano, han sido los encargados de romper el silencio. La Plaza del Azafranal ampliaba el eco de Santos Antequera, y Severiano y Antonio Contreras desde la calle Mayor
Si el viento era propicio, y desde la terraza del corral, se escuchaba muy lejos una trompeta; venía de la calle del Escribano, una calle pequeña donde vive un músico grande, Jesús Manuel García.
Es lo que se escuchaba desde aquí, pero indudablemente han sido muchas más personas las que por unos instantes han convertido nuestras calles en el principal auditorio de Membrilla. No en vano, el mayor escenario para un músico de banda es la propia calle.
Se han interpretado canciones infantiles, bandas sonoras, marchas de procesión o pasodobles. Pero el tema que se ha convertido en una especie de Himno, ha sido “Resistiré”. Hay más de 30 canciones registradas con este título en la SGAE, pero solo una, la compuesta por Carlos Toro y Manuel de la Calva, y popularizada por el dúo Dinámico, se ha escuchado por toda España en diferentes versiones.
Cuando seamos capaces de vencer al Covid 19, seguro que escucharemos al unísono esa Oda a la Alegría que hace ahora 196 años el gran Beethoven incorporó a su novena y última sinfonía. Con esta sencilla escala lo vamos a conseguir.
DO minaremos la pandemia.
RE sistiendo.
MI nimizando riesgos.
FA cilitando el trabajo de las personas que nos atienden.
SOL idarizándonos con los más vulnerables.
LA mentarnos significaría que hemos fallado.
SI gamos las instrucciones, es por nuestro bien.