"A menudo hablamos de lo que es "normal" y lo que no se ajusta a esa realidad se nos antoja extraño, raro, diferente. Pero... ¿qué es ser "normal"? Permítanme advertirles que se equivocan si son de los que piensan que lo normal es ser "normal", pues lo cierto es que lo normal es ser diferente".
Retomamos de nuevo las palabras de Inma Cotillas porque no encontramos otras mejores que definan la tremenda realidad que rige el mundo de las capacidades. Lo normal es ser diferente... Pero hay que ser muy especial para tener el valor de ser diferente. En algunas ocasiones, hay que ser muy fuerte para impedir que la diferencia no suponga desventaja. Y, siempre, hay que ser muy grandes para luchar por una sociedad donde no se estigmaticen las diferencias; como grandes demostraron ser los miembros de Membrilla Baila dedicando su tiempo y su esfuerzo para ayudar a la Asociación de Discapacitados Santiago el Mayor de nuestra localidad, a la que les une un fuerte vínculo desde el año 2008 y con la que su presidente actual, Ramón Fernández, mantiene desde tiempo atrás una estrecha relación traducida en un apoyo desinteresado.
El Festival organizado por Membrilla Baila fue ante todo el esfuerzo de un grupo de personas convencidas y concienciadas de que en la sociedad en la que hoy vivimos debemos hacer de las diferencias oportunidades, construyendo un mundo en el que ser iguales en derechos, al tiempo que aportamos todo lo bueno y engrandecedor que tiene ser diferente.
Sobre esta premisa se puso en marcha un extraordinario espectáculo audiovisual en el que la Asociación Membrilla Baila al completo se volcó e involucró, no sólo bailando, sino prestándose a realizar cualquier otra tarea necesaria (decoración del escenario, habilitar vestuarios, organización, coordinación...). Pero lo mejor de todo es que no acudieron solos, pues se rodearon de buenos amigos llegados del pueblo vecino, La Solana, que aceptaron encantados sumarse al espectáculo. Pudimos disfrutar así del arte y del buen hacer del Grupo de baile Salsa flamenca y de la entrañable presencia de la Asociación Alas de Papel y Centro Ocupacional Virgen de Peñarroya. Mención especial merece la incansable labor de Alfonsa Vinuesa, profesora de baile y creadora de todas las coreografías de la noche, al tiempo que partícipe en la ejecución de algunas de ellas. Especial también la colaboración de Inma Cotillas, encargada no sólo de copresentar el festival, llenándolo de mensaje, sino de poner sobre el escenario el regalo de su voz, un granito de arena especial y exclusivo para sumarse a esta causa con la que lleva colaborando intensamente desde este verano. Todo ello dentro del marco que se creó en el escenario con la decoración que realizaron los chicos y chicas con ayuda de sus educadoras y familiares de la Asociación Santiago El Mayor.
Y así empezaba el espectáculo. Tras una breve presentación de Ramón e Inma, el numeroso público asistente pudo disfrutar de una variada y amena demostración de lo que los miembros de Membrilla Baila pueden hacer cuando sienten dentro unas notas musicales. El grupo de chicas de flamenco y danza española interpretaron temas como Suspiros de España, Tango Flamenco y Tanguillos... El grupo de bailes de salón vivió sobre el escenario boleros, chachachás y otros sones latinos, como la salsa Ayer, de Gloria Estefan, que interpretaron junto a Inma Cotillas. Los componentes de Salsa Flamenca de La Solana se sumaron a la fiesta bailando conocidísimos temas de Mecano pasando desde el toque más flamenco de Una rosa es una rosa hasta el punto más ochentero de la velada con el remix de La fuerza del destino.
Pero la magia de la noche, sin duda, la pusieron los invitados de excepción, los usuarios de Alas de papel y el Centro Ocupacional Virgen de Peñarroya, regalándonos emotivos momentos llenos de arte y aderezados con algunas simpáticas pinceladas de humor. Hicieron que nos relajáramos bailándonos el tema Hawai Bombay, aunque se nos desmelenaron un poco colaborando en La fuerza del destino. Llenaron el escenario de ternura interpretando junto a Inma el tema Hijo de la luna y terminaron poniendo el punto divertido, caracterizados para la ocasión, en el tema No es serio este cementerio. Culminó el espectáculo con un Flashmob en el que todos los artistas se subieron al escenario ejecutando pasos sencillos e invitaron al público a que se unieran a ellos desde el patio de butacas.
El resultado: una noche llena de intensas emociones tanto para los participantes como para el público, contagiado de la tremenda fuerza que irradiaba ese escenario lleno de gente diferente volcada en un noble objetivo común que se tradujo en una ayuda para la asociación local de 800 euros de la taquilla, a la que se sumaron 250 euros donados por Membrilla Baila.
Comenzábamos la crónica con las palabras de Inma Cotillas y no encontramos otro modo mejor de cerrarla que volviendo a robarle sus reflexiones, la mejor declaración de intenciones para afrontar esta lucha y las que vengan:
"Hoy nos reunimos aquí la Asociación Membrilla Baila, Salsa Flamenca, la Asociación Alas de papel y el Centro Ocupacional Virgen de Peñarroya para demostrarles que estas personas no son especiales por tener unas capacidades diferentes a las suyas o a las mías.
Son especiales porque son capaces de disfrutar de lo verdaderamente importante de la vida. Aunque el mundo siempre vaya en su contra, aunque la sociedad no se lo ponga nada fácil ellos siguen ahí, siendo ejemplo de esfuerzo, paciencia, constancia y superación. Tienen el don de la sencillez, son puros de corazón, lo dan todo sin esperar nada a cambio.... Podría seguir pero hoy lo van a demostrar ellos mismos...
Disfruten del festival y tengan el valor de ser diferentes."
GALERÍA DE FOTOS CEDIDA POR ALAS DE PAPEL
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