Bajo el título “Emprendemos para garantizar un mundo rural Vivo”, Afammer Membrilla organizaba una nueva edición de sus jornadas con la mirada puesta en los desafíos y retos de las mujeres rurales y su importante papel en el desarrollo de los pueblos. Entre los principales hándicaps, la incorporación de la mujer a la actividad económica mediante la figura de la Titularidad Compartida. Entre los principales retos, fomentar zonas rurales vivas apoyando el relevo generacional en las explotaciones y empresas.
La jornada, a la que asistieron medio centenar de socias, contó con la presencia de Carmen Quintanilla, presidenta nacional de Afammer, y del alcalde, Jorge Navas, que junto a Mari Ramírez, vicepresidenta de la junta local, fueron los encargados de inaugurar el acto.
En las ponencias, Fernando Muñoz, ingeniero agrónomo, que abordó la problemática de la PAC y de los retos de la digitalización, y Milagros Cortés, delegada provincial del Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Centro y Canarias, que habló de los aspectos más importantes de la Titularidad Compartida de las explotaciones agrarias de Castilla-La Mancha.
En el ecuador de la jornada, una mesa redonda donde tres mujeres emprendedoras compartieron sus propias experiencias personales y vitales a la hora de gestionar sus empresas en el mundo rural: Josefa Rodero, CEO-Empresaria-Hostelera de Casa Pepe, Patricia Muñoz, responsable de bodega Naranjo y joven agricultora y Verónica Fernández de Córdoba, empresaria agrícola y consejera de Marqués de Riscal.