La asociación Afammer de Membrilla nos invita a conocer Valencia en Navidad, proponiendo un viaje que es algo más que un recorrido bajo miles de luces: Un completo circuito que aúna el espíritu navideño que se respira en la ciudad del Turia (algo mermado en los últimos tiempos por motivos que se escapan de una crónica de ocio) con el rico patrimonio cultural de la ciudad. Pero ahí no termina la propuesta viajera: se extiende más allá de la propia capital, llevando a los viajeros de Membrilla hasta el espacio natural de La Albufera y a conocer algunas poblaciones cercanas, de singular belleza y riqueza patrimonial, como Anna o Xátiva.
De este modo, un autobús de socias, amigos y familiares de Afammer Membrilla se desplazaba el pasado puente de la Inmaculada hasta Valencia, en principio con la sencilla propuesta de “luces navideñas”. Pero el viaje se convertiría en algo más.
La visita a la capital, en momentos guiada y a ratos de libre disposición, desvelaría a los vecinos de Membrilla algunos de los puntos más interesantes de la ciudad: la iglesia barroca de San Nicolás, -famosa por sus bóvedas pintadas al fresco que le han proporcionado el sobrenombre de “Capilla Sixtina valenciana”-, la Lonja de la Seda, la Ciudad de las Artes y las Ciencias, Catedral de Santa María de Valencia (joya del gótico valenciano) con su Miguelete, la Basílica de la Virgen de los Desamparados, patrona de Valencia, en la que destaca la decoración del Camarín y la bóveda. También descubrieron el cercano Palacio del Marqués de Dos Aguas, con su Puerta principal presidida por la imagen de la Virgen y los ríos Turia y Júcar.
Navidad en Valencia
La riqueza patrimonial de la ciudad cuenta estos días con un plus en las celebraciones navideñas. La oferta es amplia y sorprendió a los viajeros de Membrilla, con las percepciones respecto a su curiosa limitación en una capital de esta importancia a las que hacíamos referencia al principio. A la luminosidad del alumbrado de Navidad se suman otros elementos tradicionales de estas fechas. Pistas de hielo en las plazas, entre las que destaca la de la Plaza del Ayuntamiento; ferias de atracciones, como la ubicada en la Marina de Valencia; y muchos mercadillos más o menos navideños.
Casetas de artesanía en la Plaza del Ayuntamiento y Feria de Artesanía de Navidad, con una treintena de stand en la Plaza de la Reina, junto a la Catedral, organizado por la Asociación de Artesanos Valencianos. Una tercera escala para los de Membrilla se encontraba en el Mercado de Colón, tesoro del modernismo, donde está el mercado de la Asociación de Belenistas. Pero hay otros más, como el de la Plaza del Mercado Central, con decenas de casetas de madera llenas de adornos y productos navideños También habrá mercadillos en la Ciudad de las Artes a partir de esta semana.
En una tarde de libre disposición, los viajeros de Membrilla disfrutaron a su aire de algunos de los belenes más famosos de la capital, como el Belén de la Plaza de la Reina, con figuras de tamaño natural, el Belén del Mercado de Colón, o el de la Basílica de la Virgen de los Desamparados, de más de 100 años de historia donado por una familia valenciana … Las largas colas hacían casi imposible la visita al Belén del Salón de Cristal del Ayuntamiento, con más de 500 figuras y 45 metros cuadrados y realizado por la Asociación de Belenistas de Valencia.. Pero los visitantes que se acerquen hasta Valencia en estas fechas también podrán admirar otros Belenes de gran valor, como el Belén del Mercado Central de Valencia, nacido el año pasado a iniciativa de los propios vendedores. O el Belén de Roca (Barrio de Roca) que es el belén más grande de Valencia y el que más figuras tiene de toda España, con 1 euro de donativo para Manos Unidas.
Con unas temperaturas excepcionales, los visitantes de Afammer pudieron disfrutar de las terrazas de la capital y del alumbrado navideño mientras reponían fuerzas.
Escapadas cerca de Valencia
Afammer Membrilla ofreció a sus socias y amigos tres propuestas viajeras fuera de la ciudad de Valencia:
La primera a La Albufera, espacio natural protegido lleno de playas, dunas, barracas, bosques, arrozales y lagos, donde los de Membrilla disfrutaron y se divirtieron en un sorprendente paseo en albuferenca, la barca típica construida de forma artesana tradicional. Un tiempo para relajarse escuchando el agua y las aves lejos del ajetreo navideño de la ciudad.
La segunda propuesta, ya en el camino de regreso hasta tierras manchegas, fue la desconocida población de Anna, en la Comarca de La Canal de Navarrés, a unos 65 km de distancia de Valencia. Su nombre significa “nacimiento” o “fuente” y precisamente los de Membrilla disfrutaron de numerosos nacimientos de agua que la pueblan y de un singular espacio arquitectónico: el Palacio de los Condes de Cervellón. También pudieron disfrutar de la rica gastronomía de la comarca con un Arroz con Costra.
La última parada del viaje sirvió para desgastar calorías: La subida al Castillo de Xátiva. Una doble fortaleza a la que los de Membrilla ascendieron con gran esfuerzo, pese al uso previo del tren turístico que acerca a la cima de la sierra del Castell. Los recorridos por el Castell Menor, parte más antigua ibérica y romana, y por el Castel Major, del periodo medieval, de imponentes murallas, cerraron el periplo de los manchegos por tierras levantinas en una excepcional propuesta que, como señalábamos al principio, ha sido algo más que un “viaje a las luces de Navidad”.