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La hermandad de Santa Rita de Casia de Membrilla es muy humilde y pequeña. Sus “asociadas” mantienen un culto que contó con un gran protagonismo en la vida religiosa de mediados del siglo pasado en Membrilla y que hoy, justo 79 años después, se resiste a desaparecer. Lejos quedan ya aquellos tiempos de novenarios y grandes procesiones y traslados desde la ermita del Espino hasta la parroquia. Pero aún se mantiene el recuerdo de la santa de Casia estos días: desde el pasado sábado 20 de mayo se celebra el triduo religioso en la iglesia de Santiago el Mayor y hoy, 22 de mayo, día de su fiesta, tendrá lugar uno de las tradiciones más curiosas de las que se celebran entre las paredes del templo: la bendición y entrega de las rosas.
La tradición de las Rosas de Santa Rita tienen su origen en la propia vida de la religiosa: “Estando ya gravemente enferma en su convento de Casia y próxima a la muerte fue visitada por una pariente suya quien, al despedirse, juzgando que sería ya la última vez que habría de verla le preguntó si podía servirle en algo, a lo que Rita contestó: quiero que cuando llegues a Roca Porrena vayas al huerto de mi casa, cortes una rosa y me la traigas.”
Cuenta la tradición que, como era un invierno inusualmente crudo el de aquel 1457, la pariente creyó que Rita deliraba en su lecho de muerte, e hizo caso omiso al encargo. Sin embargo, al regresar a su pueblo y pasar delante de la casa de Rita, un impulso la llevó a entrar al huerto, viendo con asombro “que de la rama de un rosal medio cubierto por la nieve, pendía una rosa fresca y lozana”. Esta familiar cumplió entonces con el encargo, llevándole a Rita la deseada rosa.
Cuentan las crónicas que “este hecho originó que las Religiosas Agustinas de Casia acostumbrasen cubrir con rosas la urna en que yace el cuerpo incorrupto de Santa Rita, especialmente el 22 de mayo, aniversario de su piadosa muerte. Estas rosas eran distribuidas todos los años entre los bienhechores y amigos de Convento, los cuales las conservaban como preciosas reliquias”, verificándose en muchos casos curaciones milagrosas por su intercesión. Con este motivo se extendió muy pronto por todas partes la noticia de las rosas de la Santa, como también los muchos y extraordinarios favores, alcanzados por el contacto de estas rosas.”
La tradición también recaló en Membrilla y así, un año más, volverán a repartirse las rosas de Santa Rita, previamente bendecidas por el párroco, entre los fieles que asistan a la función religiosa este día 22 de mayo (21 horas), fiesta de Santa Rita de Casia.
