450 panecillos para honrar la memoria de San Antonio de Padua en Membrilla

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La hermandad de San Antonio de Membrilla recuperó con normalidad la celebración de su fiesta durante la tarde del domingo 13 de junio después de una edición algo diferente en el 2020 marcada por el Covid. Manteniendo, eso sí, todas las medidas de prevención recomendadas por Sanidad, numerosos fieles y hermanos del santo se acercaron hasta el templo parroquial para asistir a la función religiosa.

En su emotiva homilía, el párroco Raúl López de Toro volvió a recordar la figura del santo portugués, subrayando su vida de oración y su dedicación a los pobres. También desgranó uno de los numerosos milagros que han dado fama a este franciscano, doctor de la iglesia: el del pie injertado. "El pie que golpea a la madre o al padre, merecería ser amputado al instante", comentaba san Antonio tras la violenta patada dada a la propia madre por un hombre de Padua. El remordimiento llevó al implicado a amputarse su propio pie, que después sería reinjertado milagrosamente por san Antonio.

Tras la eucaristía, la hermandad local procedió al reparto de 450 panecillos del santo, bendecidos previamente por el párroco, que han sido donados en esta ocasión por una hermana en acción de gracias por una intercesión de san Antonio.

Se completaba así esta fiesta que se iniciaba unos días antes con la celebración del Triduo religioso. La Junta local, a través de su vocal Dioni Martín, hacía un balance muy positivo del último año y de la actitud de los fieles con la fiesta de san Antonio, destacando la gran participación y la actitud responsable de los asistentes en el templo, con la mirada puesta aún en la pandemia del coronavirus.

En ese balance anual, la Junta lamentaba el fallecimiento de siete de sus hermanas y recordaba la baja de dos de sus celadoras por motivos de edad, -Elisa Ruiz Merino y Amalia Arias Luna-, agradeciendo el trabajo que han realizado durante muchos años dentro de la Junta de la hermandad, destacando el generoso gesto de Amalia que en este tiempo les ha abierto las puertas de su casa para llevar a cabo el envasado de los panes de san Antonio.

Del mismo modo, desde la Junta se daba la bienvenida a quince nuevos hermanos y hermanas de san Antonio que se han sumado a este humilde proyecto durante el último año.

 

 

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