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Fieles a la cita anual, miles de vecinos e hijos de Membrilla llenaron las inmediaciones del Parque del Espino para asistir a uno de los acontecimientos religiosos más importantes de la localidad: la Bajada de la Virgen del Espino de su ermita, punto de inicio de la celebración de sus Desposorios con el varón San José.
Siguiendo el protocolo oficioso de la celebración, alrededor de las ocho de la tarde se congregaba en la Plaza Grande la comitiva formada por músicos, reina y damas 2013, alabarderos, Cofradía y autoridades civiles para iniciar un pasacalles musical que les llevaría hasta el domicilio del mayordomo-cumplidor: este año la familia Pardilla Sánchez- Elipe. Con este acompañamiento, los cumplidores se desplazaron hasta el templo parroquial, punto de partida de la procesión que traslada a la imagen de San José hasta la ermita para recoger a la “novia”, engalanada para la ocasión desde el miércoles por sus camareras.
La Virgen del Espino lució su manto rojo, una donación realizada por Pedro Menchén y Teresa Benítez en 1951 que fue minuciosamente restaurado el año pasado con el fin de preservar la riqueza de sus bordados y recuperarlo para el uso dado el grave estado de deterioro en el que se encontraba.
Como deferencia especial establecida desde hace unos años, el cuerpo de alabarderos de la Virgen fue el encargado de bajar a la Patrona de Membrillas en andas hasta los pies de su ermita, donde miembros de la Cofradía procedieron a instalarla en su carroza, con los últimos retoques de Francis, la camarera mayor. Todo ello bajo el marco musical del Himno de la Virgen interpretado por la Banda de Música Virgen del Espino, repique de campanas, aplausos y el tradicional vítor de los vecinos de Membrilla: ¡Viva la Virgen del Espino!
Al ritmo de las notas de las dos bandas de música de la localidad, la Asociación Musical Maestro Emilio Cano y la citada Banda de Música Virgen del Espino, la procesión inició su camino hasta la iglesia de Santiago el Mayor. Desfilaron por los Paseos del Espino el grupo de monaguillos de la Parroquia, el cuerpo de alabarderos escoltando las imágenes de José y María, la reina y damas de los Desposorios anteriores y la familia cumplidora, precediendo a la carroza de la Virgen del Espino, también acompañada por la Junta Directiva de su Cofradía, autoridades y numerosos sacerdotes: los párrocos Luis Sevilla y Raúl López de Toro, el predicador del Novenario y otros sacerdotes naturales de Membrilla o de fuerte vinculación con la localidad, como el caso de Eulalio Asensio, anterior párroco.
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Llegados a la Parroquia, donde fueron recibidas con repique de campanas y una pequeña colección de fuegos artificiales, las imágenes de la Virgen del Espino y de San José se colocaron a los pies del altar mayor donde permanecerán hasta el próximo lunes 25 de agosto. Una salve cantada por los vecinos que llenaban el templo parroquial cerró el acto de Bajada de la Virgen.
Desde el viernes 15 se desarrollará el Novenario en Honor a la Ntra. Sra. del Espino, hasta la celebración de su fiesta de Desposorios el domingo 24.
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