Pequeñas y sencillas obras de arte nacidas en la Universidad Popular

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Cientos de vecinos han pasado ya por la Sala de Exposiciones de la Casa de Cultura a lo largo de esta semana para ver la muestra de los trabajos realizados en los dos talleres de dibujo y pintura que oferta la Universidad Popular.

La exposición recoge una selección de obras realizadas por el centenar de alumnos de esta disciplina en la que predomina la técnica del óleo en una variada oferta temática que lleva desde el tradicional bodegón hasta los planteamientos más modernistas y étnicos y en la que tiene un importante peso el paisaje. No faltan las ya tradicionales referencias pictóricas a la arquitectura histórica y popular de Membrilla ni los conseguidos “retratos” del mundo animal, además de los motivos florales.

El Taller de dibujo y pintura surgió en el seno de la Universidad Popular de Membrilla en los años 90, ya del pasado siglo, y a lo largo de su trayectoria se ha convertido en uno de los más demandados con un centenar de matrículas anuales. La disciplina se imparte desde sus comienzos por Mercedes Sánchez. Además, hace unos años surgió un segundo taller paralelo en el que están matriculados una decena de alumnos.

Como trabajo extraordinario, este curso los alumnos del taller de dibujo y pintura impartido por Mercedes, han colaborado con el Ayuntamiento y, aceptando su petición, se han encargado de barnizar y preparar la serie de 105 oleos sobre tabla en torno al Quijote que el artista local Pedro Morales de Gracia donó al Ayuntamiento y que pudo verse, ya restaurada, el pasado mes de abril en la Sala de Exposiciones.

El Taller de dibujo y pintura rebasa ampliamente los objetivos de la Universidad Popular del aprendizaje, convirtiéndose en un modo de recibir una educación artística sin perder su matiz de entretenimiento e integración social. Los Talleres reciben alumnos de ambos sexos y de diferentes edades que van desde la veintena de años hasta los más de ochenta. Este amplio abanico de población no hace sino poner aún más en valor estos cursos en los que se consigue que vecinos y vecinas, aficionados a la pintura y sin mayores pretensiones de gloria artística, logren hilvanar con sus pinceles pequeñas y sencillas obras de arte entre las que, en muchos casos, se atisban grandes dosis de calidad. Y todo ello sin estudios artísticos previos y empleando un poco del tiempo libre en crear algo que, a todas luces, no deja de tener su valor y su belleza.

La Exposición puede verse hasta el 5 de junio en la Sala de Exposiciones de la Casa de Cultura.

Galería de imágenes

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