Los grupos de coros y danzas El Rezuelo, de Membrilla, y Alabarderos, de Bolaños, engalanaron la Casa de Cultura el pasado sábado con una estampa costumbrista original y entrañable que rescató la verdadera esencia de los bailes manchegos: la alegría y el desenfado del pueblo, tanto en la faena como en la plaza, con la elegancia propia de las rondeñas, el señorío del fandango, la gracia y la picaresca de las seguidillas y la alegría de la jota.
El Grupo de Coros y Danzas de la Tercera Edad El Rezuelo actuó como anfitrión local en este III Encuentro de Asociaciones de Bailes Regionales. Con los trece años recién cumplidos, el grupo aún mantiene a tres de sus socios fundadores, -Juan Antonio, Ramón y Sacramento-, aunque en los últimos años ha llevado a cabo un importante relevo generacional que está integrando a nuevos componentes. Orgullosos de ser unos de los máximos exponentes de las raíces más puras del folclore local, el grupo El Rezuelo sigue bailando la reina de la música popular de La Mancha, la Seguidilla de Membrilla, “como la bailaban los viejos”. Sobre el escenario de la Casa de Cultura, los treinta componentes de esta agrupación regalaron al público una selección de su repertorio: La Jota a la Virgen del Espino, el Fandango de Membrilla, la Seguidilla de Membrilla, la Malagueña y la Jota del Uno. De la vinculación familiar de Ramón Nuñez, del cuerpo de rondalla, con Extremadura, el grupo ha traído hasta nuestra localidad el Fandango extremeño y la Rondeña extremeña, de ritmo más pausado y elegante, como curioso contrapunto al baile regional. Para finalizar su actuación, nada mejor que la característica Jota Popular de Membrilla, llena de localismos y referencias a nuestra población, que el grupo dedicó a los invitados de Bolaños de Calatrava.
La Asociación de Coros y Danzas Alabarderos protagonizó una de las actuaciones más aplaudidas de las veladas folclóricas que se han realizado sobre el escenario de la Casa de Cultura. Pese a su poco recorrido, nació en el año 2004, los 35 componentes del grupo demostraron que son unos indiscutibles embajadores de la música manchega, no en vano cuentan con un repertorio variado compuesto por piezas de diferentes pueblos de nuestra región. El grupo, que ya cuenta con un CD propio, ha grabado también el programa La Mochila con Imás TV, que se emitirá en Noviembre. Pero lo más curioso del grupo es su propio nombre: Alabarderos. La presidenta de la agrupación contó que son Alabarderos del Santísimo Cristo de la Columna, patrón de Bolaños, al que acompañan en procesión durante sus fiestas patronales. Lo cual no deja de tener un curioso vínculo con nuestra tradición de los alabarderos, la guardia de honor que escolta a nuestra patrona la Virgen del Espino en sus fiestas de los Desposorios, con la diferencia de que nuestras alabardas no están adornadas con motivos florales.
El grupo de Bolaños, que entró en la Casa de Cultura bailando su particular pasacalles entre el público, ofreció en una primera parte la Jota de la Albahaca, las Seguidillas corridas de Almansa, la Jota del cordón, la Rondeña navalqueña y la Jota de Socuéllamos. En una segunda parte, rescató sobre el escenario unas divertidas y entrañables estampas costumbristas de antaño en las que recordaron los juegos tradicionales de nuestros mayores, el pretender de los novios en las esquinas y las plazas, los días de vendimia... Así, fueron muy aplaudidas piezas como El Pañuelo y La Uva, que estuvieron acompañadas por el Fandango de los Alabarderos, pieza original del grupo en música, letra y danza, y la Jota de Casino, que dedicaron a los anfitriones de la velada. Una noche grande de intenso sabor manchego en la que los componentes de El Rezuelo y los Alabarderos, siempre cercanos, picarones y familiares, conquistaron al público como mejor saben: al ritmo de jotas y seguidillas.
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