Hace, pues el día se presentaba propicio y las miradas pedían sol y el sol acudió a la cita de la marcha por la igualdad, organizada por el Ayuntamiento de Membrilla a través de la Concejalía de Igualdad y el Centro de la Mujer, en colaboración con el club de atletismo de Membrilla y el club Membribike BTT.
El verano se vislumbra en el horizonte, y los cuerpos piden marcha para estar esbeltos y tonificados, para cuando las mangas y los pantalones se acorten y las medias se guarden y los pies se muestren y los hombros se descubran a través de refrescantes escotes; pues para cuando todo esto llegue, hay que estar a punto, y qué mejor que una buena caminata.
Membrilla que es un pueblo participativo, se enfundó las deportivas y los chándales y se puso a pedalear, a correr o a andar.
Algunos de los NO INVITADOS fueron el desánimo, la pereza, y la desilusión, entre otros, y claro está, como son tan desaboridos no se presentaron a la cita, con lo cual, la marcha resultó amena, dinámica y sin problemas; sobre ruedas diría yo, como una ingeniosa mamá que mataba dos pájaros de un tiro; por un lado satisfacía su afición deportiva y por otro atendía su faceta de madre, proporcionándole a su retoño un divertido paseo-carrera en cochecito.
El que no se divierte es porque no quiere.
Las dinámicas coreografías de Batukas, coordinadas por Mª José, la monitora de aerobic, en la Caseta Municipal, pusieron la meta en la marcha por la igualdad, que nos dejó a todos los participantes en un buen estado corporal.
Por cierto, las agujetas tampoco estaban invitadas al evento, pero conociéndolas como las conozco, me temo que estas sí se presentarán, aunque como siempre, llegaran al día siguiente…
Alicia Jiménez Muñoz
