El sacerdote Óscar Argenis Olivares Pino fue el encargado de anunciar la Semana Santa de Membrilla el pasado sábado en un pregón volcado en la búsqueda del verdadero sentido de estas fiestas: el mensaje salvador de la Pasión y el reconocimiento del sufrimiento humano en la mirada divina. El pregonero estuvo acompañado por los sacerdotes Raúl López de Toro y Luis Sevilla, miembros de las hermandades de Pasión de la localidad y de la Junta de Cofradías, autoridades civiles y numerosos vecinos que llenaron la Casa de Cultura. Sobre el escenario, un Calvario presidido por la Cruz y el estandarte de la Hermandad de Jesús Nazareno Yacente y Virgen de los Dolores, con la advocación de su Dolorosa titular que este año preside el cartel de la Semana Santa local.
Actuó como mantenedora del acto Marta Maroto en representación de los jóvenes que el año pasado recibieron el sacramento de la Confirmación.
La presentación de Alfonso Villalta, pregonero de la Semana Santa 2016, desveló al público la joven esencia del espíritu religioso y personal de Óscar Olivares, nacido en Venezuela en 1983, y ordenado sacerdote en el 2008, fecha desde la que estuvo trabajando en la Diócesis de Trujillo. Desde hace cuatro años, fruto de la colaboración entre las diócesis de Trujillo y Ciudad Real, se encuentra en nuestro país ampliando su formación académica y humana, colaborando en la pastoral de la parroquia de la Asunción de Manzanares. Alfonso Villalta subrayó en su presentación su calidez humana: “Ha aprendido que en los libros se puede hablar de Dios, pero que es en el día a día y en la cercanía con las personas, donde realmente se conoce a Dios.”
Óscar Olivares trajo al pregón de Semana Santa el espíritu hermano de la cultura hispanoamericana, el verdadero sentido “católico” (=universal) de nuestra Iglesia, pero sobre todo quiso homenajear y pregonar nuestra Semana Santa ciñéndose a las vivencias propias de Membrilla. Como mensaje principal, no quedarse en la mirada divina de Jesús, de María, de los santos, que tanto nos conmueve; sino buscar la mirada de los otros. Encontrar en la mirada de sufrimiento de Jesús, el sufrimiento de los hermanos. El sacerdote realizó un recorrido por los principales escenarios de la Semana Santa de Membrilla invitándonos en cada uno de ellos a no quedarnos en las formas externas, sino a encontrar el verdadero sentido de cada episodio de la Pasión y de la Resurrección, desde los preámbulos del Viernes de Dolores y el Domingo de Ramos, hasta el júbilo de la Vigilia y Resurrección, con una especial intensidad en las celebraciones del Jueves Santo, de la madrugada del Viernes con nuestro Sermón del Encuentro y en la Procesión del Santo Entierro.
Finalizó el turno de intervenciones el presidente de la Junta de Hermandades, Pedro Bellón, agradeciendo el trabajo de cada una de las personas que construyen la Semana Santa local y trasladando el mensaje de que esta celebración necesita de la suma de todos.
La aportación musical estuvo a cargo de un grupo de quince componentes de la Asociación Musical Maestro Emilio Cano que ofreció un elegante y sutil concierto de cámara, desgranando algunas de las marchas más bellas de la Semana Santa, como Mi Amargura, Caridad del Guadalquivir o Concha. Cerraron el acto con La Saeta, pieza para la que contaron con la colaboración de Sandra Fernández.