Manos Unidas de Membrilla organiza una charla solidaria con María Teresa Andrade Pérez, misionera de María Mediadora, el próximo 6 de febrero, a las 19:30 horas, en las instalaciones del Casino, situado en la Plaza del Azafranal.
Con este encuentro, el grupo parroquial de Manos Unidas invita a los vecinos a acercarse al mundo del voluntariado misionero en la atrayente y enriquecedora personalidad de Sor María, de la que se ha escrito "esconde en su pequeño cuerpo un gran corazón y una gran vitalidad que le ha permitido cruzarse medio planeta y tener su lugar en el mundo en el pequeño país africano de Malawi".
María Andrade, enfermera de profesión, nació en Puenteceso (La Coruña) en 1949. Trabajando en el Materno Infantil de La Coruña conoció a las religiosas Misioneras de María Mediadora y, seducida por su obra, marchó hasta Ávila para hacer el noviciado. Tras estudiar medicina tropical e inglés, en abril de1986 se marchó a Malawi, donde permanecerá hasta el año 2000. En Malawi se hizo cargo, como Directora, de un hospital rural en la diócesis de Lilongüe, el Hospital Rural Mlale, y posteriormente, en 1991, se le encomienda el comienzo de la Misión Saint Mary's, también llamada "Chezi" en la misma diócesis: dispensario, medicina preventiva, hospital para niños desnutridos y hogar para niños huérfanos.
En el año 2000 fue destinada de nuevo a España para el Consejo General de la Congregación, en labores de asesoramiento interno y visita a las religiosas que dirigen misiones en la India, África, Honduras, Ecuador, Colombia y otros países. En esta labor, ha visitado varias veces y permanecido por periodos de tres a cuatro meses Malawi, India, Colombia, Honduras y Ecuador. En el 2013, estuvo en Malawi de febrero a mayo y en la India de agosto a diciembre. Para ayudar a todos estos proyectos de desarrollo, las Misioneras de María Mediadora crearon la Fundación Esteban González Vigil, formada por gente voluntaria, que busca combatir la pobreza a través de la educación y la formación socio sanitaria en algunas de las zonas más pobres del planeta, prestando especial atención a los más desfavorecidos: los ancianos y los niños. Fundación que durante algún tiempo presidió la propia María Teresa Andrade.