Los alumnos del Colegio San José de Calasanz derrocharon arte y tronío en el festival de fin de curso celebrado el pasado lunes en el marco del nuevo gimnasio del centro. Como viene siendo habitual en los últimos años, el festival se convirtió en una gran demostración de las habilidades artísticas y musicales de los alumnos del colegio tanto en su versión más popular y castiza como en la interpretación musical más clásica, sin olvidarse de los nuevos ritmos propios de los musicales o las bandas sonoras de cine. Una tradición musical que este año ha continuado de la mano de Inés, la nueva profesora de música, con el apoyo y la implicación de todos los tutores.
Abrió el festival la propia Inés, con un video-mensaje de ánimo y cercanía, pese a los miles de kilómetros que la separaban del centro debido a su viaje a Turquía. Tras las oportunas presentaciones, los más pequeños del San José de Calasanz se pusieron el mundo por montera y se lanzaron a la pista para convertirse en diminutos Quijotes, Sanchos y Dulcineas (de impresionantes bordados y encajes) que, casualmente, se sabían al dedillo el himno del Membrilla C.F. entre otras piezas de hondo calado manchego. Los alumnos de cuatro años, vestidos de peineta, mantilla y sombrero cordobés, agarraron el abanico y la muleta y se lanzaron al albero para representar una lucida fiesta taurina, brindis incluido, rematada al ritmo del pasodoble España Cañí. Siguió la interpretación los alumnos de cinco años bailando ¡Que viva España! como colofón a su etapa en Educación Infantil, que se cerró con la tradicional entrega de orlas.
Los alumnos de primer ciclo optaron en esta ocasión por las bandas sonoras de las películas Disney interpretando sendas coreografías con temas de La Sirenita y El libro de la Selva.
El segundo ciclo se decantó por los clásicos realizando interpretaciones ayudadas por la percusión, la voz y la flauta. Tercero interpretó la Danza China, del ballet El Cascanueces de Tchaikovsky, ronronearon al ritmo del gato que bailaba el vals, de Leroy Anderson, y concluyeron con la zarzuela La Tempranica del maestro Giménez. Los alumnos de cuarto interpretaron Carmen, de Bizet, y el Canon de Pachebel.
El festival concluyó con las interpretaciones musicales de los alumnos del Tercer Ciclo. Quinto A interpretó la Barcarola de los Cuentos de Hoffmann, de Offenbach, quinto B eligió la banda sonora de Carros de Fuego y los sextos, otro clásico Disney: La Bella y la Bestia. Los alumnos de sexto se despidieron de su etapa escolar en el colegio y recibieron de manos del Ampa del centro un pequeño obsequio de recuerdo. El festival se cerró con la proyección del video conmemorativo del 50º Aniversario del Colegio, elaborado por Pedro Manzano, y varias coreografías montadas por las alumnas de sexto curso.
El Ampa también celebró su fiesta de fin de curso
El Ampa también se sumó, un año más, a las actividades de fin de curso con su ya tradicional fiesta celebrada en la calurosa tarde del viernes 17. Las altas temperaturas propiciaron que la novedosa atracción de agua resultase de gran acierto para los niños, que tras bajar por el tobogán del castillo hinchable caían a una mini piscina de agua.
El patio del colegio se transformó en una improvisada playa llena de bikinis, chanclas, camisetas mojadas, gorras... Los niños disfrutaron mucho y así lo demostraban la alta participación de los chicos en todas las atracciones y talleres durante toda la tarde. Además de la atracción de agua, hubo un circuito de karts, un jumping y dos hinchables para los más pequeños. También se realizaron talleres de muñecos de lana, marcapáginas, pulseras, maquillaje, pinzas, decoración de tazas, de dibujo y fabricación de tarjetas...
Desde el Ampa se quiere agradecer especialmente el trabajo y la colaboración de todas las madres que estuvieron en los talleres ya que sin su participación sería imposible llevar a cabo las actividades de la tarde.
El Ampa puso a disposición de los socios una barra de bar donde se sirvieron bebidas y bocatas en una animada fiesta que se prolongó hasta la medianoche.