Viaje más lejano de la temporada. Llegamos a un abarrotado Pabellón de Fuente de Pedro Naharro con una enorme afición que no ha parado de animar en todo el encuentro. Nos enfrentábamos al equipazo de la U.D. Fontense, tres veces consecutivas subcampeones de Liga, y que llevaban varios años sin caer en casa. Hasta hoy.
Quizá la dolorosa derrota de la pasada semana nos ha hecho de entrenar de otra manera, nos ha hecho trabajar mejor, defender más fuertes y no perderle la cara al partido en ningún instante.
Llegábamos con las ideas claras. Defender, defender y... Ya llegarán. Y si no llegan, pues 0-0 y para casa. Y así fue.
Primera parte en la que defendiendo juntitos y fuertes supimos aguantar el dominio local e incluso nos desenvolvimos en ataque y tuvimos nuestras ocasiones con varios tiros de media distancia de Rodallega. Astis se puso el traje de faena y paró todo lo que le llegó.
Llegamos al descanso con 0-0 y tomamos una difícil decisión. Dar continuidad a Astis en portería (normalmente juega un portero cada parte) porque se notaba que hoy tenía el cerrojo echado.
La segunda parte siguió en todo momento con la misma tónica pero nos cargamos pronto de faltas y faltando 5 minutos ya teníamos hechas las 5. Teníamos que defender lo que quedaba sin hacer falta.
Fontense no se conformó con el empate sin goles y faltando 3 minutos atacaron con portero jugador.
Orovio robaba un balón anticipándose al rival y a la carrera anotó el 0-1 a puerta vacía. Un minuto después se repitió la misma jugada y Orovio de nuevo, enorme, marcó el 0-2.
Después, Fontense falló un doble penalti y así llegamos al final del encuentro.
PARTIDAZO EN MAYÚSCULAS, inmejorable que sirve para coger moral y ganar nuestro segundo partido a domicilio consecutivo en un pabellón 'DONDE NO GANA NADIE'.