Los días 22, 23 y 24 de febrero, “Los Faranduleros” llevan al escenario de la Casa de Cultura de Membrilla “El Veredicto”, una obra de teatro basada en “Doce hombres sin piedad”, de Reginald Rose, emitida por vez primera en una cadena de televisión americana en el año 1954, estando considerada como uno de los mejores dramas (con ciertos tintes policiacos) de los últimos tiempos, lo que llevó a TVE en 1961 y 1973 a realizar dos versiones para su programación y en las que intervinieron, entre otros, actores de la talla de Jesús Puente, José Bódalo, Pedro Osinaga, Sancho Gracia, Jose María Rodero, Ismael Merlo, Manuel Torremocha, etc.
Esta puesta en escena es una apuesta personal del director artístico de la Asociación, compartida totalmente por todos los que forman el elenco de actores, a pesar de su gran dificultad interpretativa (y de dirección) que supone y el gran esfuerzo que han tenido que realizar para su montaje.
Un jurado está obligado a emitir su veredicto de culpable o inocente en un juicio por homicidio. Un veredicto de culpabilidad conllevará necesariamente a una sentencia de muerte.
Las diferentes razones del jurado para mantener prejuicios contra el imputado, como la complicada relación familiar entre uno de estos y su propio hijo; el color de la piel de la persona juzgada, o su procedencia de un barrio conflictivo, desencadenan una serie de situaciones que tan solo practicando una reflexión serena llevan a discernir sobre la realidad y la apariencia.
La obra se ha representado y continua haciéndose en numerosas ocasiones, versiones y bajo muy diferentes denominaciones. Se ha llevado repetidamente al cine y televisión en el mundo entero. La complejidad de los personajes de la misma, la riqueza de sus textos, comportamientos, intriga, trama y conclusión lo merecen.
Las localidades para asistir se pueden retirar del Centro Cultural San León, en su horario habitual.
- SOCIOS: Los días 14 y 15 de febrero.
- PÚBLICO GENERAL: A partir día 18.
- Los días de la representación: UNA HORA ANTES EN TAQUILLA.
Os esperamos. Valdrá la pena.
