Estos fueron los ingredientes del menú con el que la Asociación de Cultura y Ocio “LOS FARANDULEROS”, celebraron el DIA MUNDIAL DEL TEATRO.
Todo ello aderezado con máximo cariño, al calor de un público que llenó la Casa de Cultura de Membrilla, entregado y ávido de vivir (o revivir) las emociones y lances de la comedia que Pedro Mario Herrero escribió con indudable acierto.
Principalmente, la reposición de “LA BALADA DE LOS TRES INOCENTES“ fue el motivo de deferencia o cortesía hacia el pueblo de Membrilla, por ser “cuna aventajada de cultura”, además de celebrar de una forma simbólica, pero efectiva, esta fecha tan emblemática para los amantes del teatro y compartir con todos la corta, pero provechosa andadura de esta Asociación.
A pesar de la coincidencia en fecha y hora con varios acontecimientos de relevancia social celebrados en la localidad, la generosidad primó nuevamente e hizo posible que el ambiente que se respiraba en el repleto local donde se llevó a cabo el evento, estuviera plagado de hechizo.
Quienes asistieron al mismo, fueron testigos, también, del reconocimiento al trabajo, entrega y sacrificio de quienes en la actualidad se dedican, aunque solo sea de forma amateur, al bello arte de la representación teatral.
Seis fueron los Grupos y Asociaciones que recibieron de manos del elenco de actores de la obra representada, una placa de cerámica personalizada con el nombre de su Grupo, confeccionada por el artista-artesano Cristino de Santiago, y un detalle-recuerdo de BASIDA MANZANARES que les hizo entrega uno de los voluntarios de esta organización.
La recaudación se destinó íntegramente a BASIDA, ”la O.N.G. que ofrece un sitio digno, un hogar acogedor o una familia a todos aquellos que por la fase avanzada de su enfermedad y por la situación de exclusión social, precisan una atención personalizada que mejore su calidad y expectativas de vida”.
Otro ingrediente más de este menú tan particular.
Quizá el brillantísimo e impecable trabajo realizado por el cuadro de actores de “LOS FARANDULEROS” al que ya nos tienen acostumbrados, fue lo que menos importaba de la velada, donde se conjugaron varios condicionantes que hicieron que este DIA MUNDIAL DEL TEATRO, tuviera la magnificencia que merece.