El próximo sábado, 19 de Noviembre, la banda de nuestra asociación vuelve a los escenarios. Esta vez, con el tradicional concierto en honor a Santa Cecilia, que este año teñirá de azul la Casa de Cultura.
Como todos ustedes saben, ese color azul del cartel anunciador del concierto es con motivo de la primera interpretación en Membrilla (y en la comarca) de Rhapsody in blue, del genial compositor norteamericano George Gershwin, que, entre otras, además escribió Porgy and Bess o Un americano en París. Para la interpretación de esta fantástica obra contaremos con Alfonso Candelas López-Villalta como pianista solista: amigo de nuestra banda desde hace muchos años, familiar de algunos de nuestros componentes y que siempre que la agenda se lo permite y las obras que interpretamos necesitan de pianista, recurrimos a él para ayudarnos en esa labor. (piquen en el nombre para conocer con más detalle su currículum).
La adaptación de la obra, original para orquesta, es de Felipe Vicente Manresa, también viejo conocido y amigo de nuestra banda y con el que contaremos entre nosotros sobre el escenario (también pueden conocer el currículum picando en su nombre).
El resto del programa que interpretaremos mezclará obras americanas, como Glenn Miller Story, una adaptación de la música compuesta por este genial trombonista o Fiesta Tropicale, una selección de conocidos temas de Lationamérica. Pero también podremos escuchar música española, como no podía ser de otra forma, como la selección de la zarzuela El Bateo, el Anthem de Highlights from Chess, adaptada para banda por Johan de Meij o Soleriana de Carlos Suriñach, malogrado compositor catalán, que, como siempre ocurre en nuestro país, tuvo más fortuna y fama fuera de nuestras fronteras. Esta obra, de alta dificultad (nivel 5 en el argot bandístico) está dedicada al Padre Antonio Soler, compositor y clavecinista español del siglo XVIII. En concreto, es una obra basada en el Fandango escrito por este compositor del final del Barroco español.
Un concierto, como siempre, diferente y lleno de calidad musical que promete ser una oportunidad de escuchar música que nunca ha sido interpretada en Membrilla, así como otras obras que nos recuerdan a la música de baile de mediados de siglo y nuestras tradicionales zarzuelas, el género español por antonomasia.