Fieles a su cita de otoño llegan los componentes de este grupo de teatro para divertirse y divertir a su público. Siempre lo consiguen, pero en esta ocasión es de justicia decir que con creces, ya que eligieron una comedia de la cual pudieron exprimir hasta la última gota del sentido del humor que contenía el texto. Un sentido del humor imprescindible para enfrentar las vicisitudes de la vida, también incluidas en la obra y disfrazadas de ironía.
De este modo, el pasado fin de semana, El Atardecer ponía en escena Anacleto se divorcia, comedia en tres actos original de Pedro Muñoz Seca y Pedro Pérez Fernández.
Mucho han cambiado las formas y poco el fondo, desde que los autores estrenaran esta comedia allá por 1932. Entre líneas y entre carcajadas pudimos apreciar la incongruencia humana representada magistralmente por todo el elenco y concretamente por los protagonistas de la obra, Pepe Crespo y Pepi Martín de la Leona, que ponían en manos de la modernidad las discrepancias propias de un matrimonio haciendo uso de una recién estrenada Ley de Divorcio. “A moderno no me gana nadie…”, decía Anacleto (Pepe Crespo) en una parte del diálogo, sobrepasado por una pugna interna entre el amor hacia su mujer y sus ansias de libertad. Como si lo uno y lo otro no pudiera ser compatible.
Han pasado más de ocho décadas desde que se escribiera esta comedia y el ser humano sigue buscando esa compatibilidad en torno a la cual giró toda la obra salpicada de sátira, verdades a medias y subterfugios bien interpretados por todo el elenco de El Atardecer que estuvo compuesto por: Pepi Martin de la Leona en el papel de Baldomera, Tomasa Contreras como Gracia, Rosario Sánchez-Elipe como Manolita, Guadalupe Ramírez como Sara, Antonia Quiñones como Rosa, Mª Antonia Bellón como María, Martín Montero en el papel de don Felipe, Pepe Crespo fue la voz de Anacleto, Gaspar Fernández interpretando al desastrado y divertido Juncosa, Francisco Ballesteros como Carlos y Vicente Bellón hizo el papel del cocinero Dupónt, todos ellos apoyados por el apunte de Antonia Quiñones y Juani Ruiz y todos dirigidos, una vez más, por José Sánchez-Prieto. Decorados, Vestuario y maquillaje corrió a cargo del Grupo El Atardecer.
Las más de dos horas que duró la representación estuvieron salpicadas por las risas y los aplausos de un público totalmente entregado. Sin duda una buena ocasión la que tuvimos los aficionados al teatro para recrearnos en este bello arte de la farándula.
Desde estas líneas solo queda dar la enhorabuena a los que hicieron posible que, una vez más, se abriera con acierto el telón.