Agricultores y ganaderos de toda Castilla-La Mancha se concentraron este miércoles al mediodía frente a la sede de la Subdelegación del Gobierno de Ciudad Real para manifestar su indignación y su frontal rechazo a la situación de inseguridad que se vive en el campo, con robos continuos. La concentración comenzó con un minuto de silencio en memoria de Pedro Fernández, trabajador de una finca ganadera de Cinco Casas (Ciudad Real) muerto el pasado viernes durante el asalto de unos encapuchados a la explotación.
Durante el acto, el presidente de ASAJA, Pedro Barato, lamentó que “finalmente ha ocurrido lo que dijimos que iba a ocurrir, la muerte de un trabajador del campo”. Ante esta desesperante situación, el dirigente agrario señaló que el sector agrario no acepta más engaños y exigió la modificación del Código Penal, porque “todo lo que no sea eso no servirá de nada”. En ese sentido, lamentó que el Gobierno actual no quiso modificar el Código en junio de 2010, coincidiendo con la aprobación de su reforma.
Barato, que agradeció el esfuerzo de los miembros de los Cuerpos de Seguridad del Estado, afirmó rotundamente que los delincuentes “no pueden entrar por una puerta y salir por otra, se tienen que pudrir en la cárcel, pues además de contra nuestra forma de ganarnos la vida están atentando contra lo más sagrado, nuestras propias vidas, y son capaces de cualquier cosa”.
Además, y hasta la reforma de la ley demandó presencia policial continuada en el campo para evitar unos delitos que “están arruinando a agricultores y ganaderos, que acuden atemorizados a las fincas y explotaciones”.
Ante la formación de patrullas de agricultores y ganaderos, Pedro Barato indicó que “no es lo idóneo, pero no tengo fuerza moral para decirles que no lo hagan”.
Comunicado
La concentración por la seguridad y nuestra vida en el campo finalizó con la lectura de un comunicado, a cargo del presidente de ASAJA Castilla-La Mancha, Fernando Villena, en el que se exige a los responsables políticos un compromiso firme, urgente y definitivo para el endurecimiento de las penas. Villena también manifestó que “ya no es época de buenas palabras ni de medidas temporales sino de actuaciones eficaces”.
Además de Barato y Villena, en la concentración estuvieron presentes el secretario general de ASAJA Ciudad Real, Florencio Rodríguez; el gerente, Agustín Miranda; miembros del Comité Ejecutivo; el secretario general de ASAJA Castilla-La Mancha, José María Fresneda, y los presidentes de Guadalajara, Antonio Zahonero, y Toledo, Blanca Corroto.
Comunicado por la seguridad y nuestra vida en el campo
Hoy, miércoles 7 de diciembre, en Ciudad Real, ante las puertas de la Subdelegación del Gobierno, los agricultores, ganaderos y trabajadores del campo de la provincia de Ciudad Real y de toda Castilla-La Mancha venimos a manifestar nuestro más frontal rechazo a la situación de inseguridad que estamos viviendo en nuestros pueblos y explotaciones.
Hoy estamos aquí para denunciar que hechos como los ocurridos el pasado fin de semana en Cinco Casas no deben volver a repetirse. Vaya por delante nuestra solidaridad y apoyo a las familias de los afectados.
Desde aquí queremos exigir a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que continúen con sus actuaciones para combatir el incremento de esta lacra social.
A los responsables políticos les exigimos un compromiso firme, urgente y definitivo de endurecimiento de las penas, único camino para acabar con una situación desesperante que tiene atemorizados a los habitantes de las zonas rurales.
También demandamos el control administrativo y policial de los receptores de los productos, maquinaría e instalaciones sustraídos, pues deben atajar esta grave problemática desde todos los frentes.
Basta ya de buenas palabras, de medidas temporales, de delincuentes campando a sus anchas por las calles. Es vergonzoso que personas con más de 100 actos delictivos cometidos tengan condenas de sólo 3 meses.
Es momento de actuar con decisión, de que se tomen en serio un problema que afecta a millones de personas en toda España y que aumenta cada día.
De los hurtos pasaron a los robos, luego a los destrozos y ahora a los asaltos brutales. No es de ley que ciudadanos honrados acudamos a explotaciones y fincas con el pánico en el cuerpo. ¡Basta ya! a una situación que hay que atajar de inmediato.
Los hombres y mujeres del campo tenemos el mismo derecho que otros a acudir a nuestros puestos de trabajo con tranquilidad, pagamos los mismos impuestos o más que el resto de ciudadanos, y demandamos el mismo trato, los mismos servicios.
Además del verdadero miedo, los robos están arruinando a la ya maltrecha economía del campo, con quebrantos económicos, en algunas ocasiones irreversibles, ocasionados en las explotaciones agrícolas y ganaderas.
Y esto es una realidad, en los últimos años los robos en el campo han aumentado más de un 30%. Esto hace necesario una mayor presencia policial permanente en el campo y la modificación del Código Penal.
Nosotros debemos seguir luchando, reivindicando la seguridad en el campo y en nuestra vida. Para ello tenemos otra gran oportunidad de expresar nuestra indignación con esta situación a los representantes políticos el próximo sábado 17 de diciembre, durante la tradicional comida de hermandad de ASAJA.
Todos debemos expresar nuestro rechazo a esta lacra social incesante que hace todavía más complicada la viabilidad de nuestras explotaciones.
Y todos debemos exigir un derecho fundamental de las personas, vivamos donde vivamos, el mantenimiento de la seguridad. Y es que el campo no puede ser también el gran olvidado en materia de seguridad ciudadana.
¡BASTA YA!
Y MUCHAS GRACIAS