La esencia de la Maratón radica en disfrutar cada zancada, cada metro, sintiéndonos vivos con lo que estamos haciendo, compartiendo el sufrimiento en búsqueda de un objetivo en común, que no es otro que ir superando los límites que nos vayamos imponiendo e ir creciendo tanto mental como físicamente durante la preparación.
Triunfar en la Maratón no se reduce sólo a conseguir la marca deseada, dado que ésta es totalmente circunstancial, bajo mi punto de vista, triunfa todo aquel atleta que ha sabido disfrutar día a día con el entrenamiento, superar cada uno de los obstáculos encontrados por el camino y se ha plantado en la línea de salida con la satisfacción y el orgullo de haber realizado un buen trabajo.
El domingo pasado, 25 de marzo, se celebró en la ciudad condal la edición 34 de la Zurich Marató de Barcelona, la que se ha convertido en la prueba maratoniana que más participantes aglutina de España y que este año se ha situado en la cuarta de Europa, con un total de 19.507 inscritos; toda una prueba de que esto del atletismo popular está en pleno auge. Pues bien, entre los casi 20.000 inscritos estaban seis atletas populares de Membrilla, representando a nuestro club, dispuestos a completar la distancia mítica de los 42 kilómetros y 195 metros, con distintas perspectivas pero con la misma ilusión.
No había amanecido aún, cuando nuestros runners se dirigían andando desde el hotel a la bonita Plaza de España que es de donde partiría la multitudinaria prueba, el cambio de hora y los nervios haría que hubiesen dormido poco, pero las ganas y la ilusión suplía la falta de horas de sueño.
La organización había predispuesto 3 salidas distintas con distintos cajones de salida, según la marca prevista por cada participante. En la primera salida tres de los nuestros partirían en post de conseguir sus objetivos: Pedro Román Romero a batir el record del club e intentar bajar de las 2 horas y 45 minutos, todo un reto; Joaquín Lozano, pensando en completar su quinta maratón consecutiva bajando de las 3 horas, otro reto mas, a pesar de la falta de entrenamientos; y Pedro Moraleda a batir marca personal a pesar de las molestias de los últimos días y esperando que no se le agravasen durante la carrera pues su estado de forma era inmejorable. En la salida 3 que partió aproximadamente 15 minutos después, estaban los otros tres participantes de nuestro club: Ángel Pardilla que al igual que Joaquín llegaba falto de entrenamientos a intentar bajar de las 4 horas; Ángeles Lozano a disfrutar de la carrera, terminarla y si de paso bajaba de 4 horas 20 mejor, por lo que el objetivo estaba muy alto; y Tere Ballesteros que con un catarro que venía arrastrando ya toda la semana se conformaba con acabar sin sufrir mucho.
Una maratón es una prueba donde el cuerpo se pone al límite y los objetivos iniciales pueden convertirse en enemigos si son muy ambiciosos. Pedro Román comprobaría en su primera maratón “oficial”, pues era la primera que disputaba a tope, lo duro que es completar la distancia de Filipides y saltar el muro le costó lo suyo a pesar que en los primeros kilómetros fue inteligentemente reteniéndose para llegar con fuerzas al final y conseguir pulverizar el record del club con una marca de 2 horas 43 minutos y 43 segundos no consiguiendo por muy poco estar entre los 100 primeros, apenas cuatro posiciones se lo impidieron, pero el objetivo estuvo alcanzado con creces.
Joaquín Lozano sería el segundo de los nuestros en llegar. A pesar de no tener buenas sensaciones durante toda la carrera, arriesgó al principio marcando un ritmo más fuerte en contra de sus pensamientos iniciales para lograr su objetivo y aunque sufrió en algunos momentos consiguió bajar de nuevo, y ya es la quinta vez, de las 3 horas, dejando el crono en 2 horas 57 minutos y 57 segundos, todo un logro para él.
Pedro Moraleda correría inteligentemente de menos a más y con excelentes sensaciones iría haciendo parciales para bajar sobradamente de su objetivo inicial de 3h 15’ hasta que su cuadrices dijo basta en el kilómetro 36 y tuvo que reducir el ritmo, incluso andar muchos metros para como mal menor completar su cuarta maratón. A pesar del jarro de agua fría que es llegar en excelentes condiciones e irse al garete todas tus ilusiones por culpa de una lesión muscular, consiguió marcar un tiempo que muchos quisiesen sin lesionarse de 3 horas 32 minutos y 8 segundos por lo que le damos ánimos y que sin duda la próxima lo conseguirá.
Ángel Pardilla partiría con las dudas de si llegaría a completar la distancia de la prueba reina del atletismo y comenzó reservón, acumulando kilómetros y encontrándose cada vez mejor, eso sí, pasando algunos momentos duros como cualquier maratoniano, pero entrando en meta envuelto en la bandera del club y consiguiendo parar el crono en 4 horas 3 minutos y 11 segundos dedicando este su pequeño gran triunfo a su esposa e hija allí presentes.
Ángeles Lozano comenzó su maratón con la ilusión de disfrutar de la distancia, y su objetivo no era otro que ese, a parte de conocer la ciudad condal, monumentos, parques y calles, de hecho fue provista como buena turista de la cámara fotográfica y aunque también pasó momentos duros, completaría los 42 kilómetros y pico en un buen tiempo de 4 horas 31 minutos y 24 segundos, poniendo de moda otra forma de hacer turismo.
Tere Ballesteros es caso aparte, pues a pesar de ser la veterana del grupo, pasó una semana con un constipado de caballo que a cualquier mortal dejaría sin ganas de nada. Pues bien, ella no solamente se atrevió a ponerse en la línea de salida, sino que vencería las adversidades y conseguiría completar la distancia de Filipides en menos de 5 horas, exactamente en 4 horas 53 minutos y 9 segundos, pero que nada más cruzar la línea de meta ya estaba pensando en desquitarse y preguntando cuando podría correr la próxima, todo un ejemplo de que esto es una droga y engancha, divina droga.
Mencionar a las animadoras Jacinta, Ángela, Mari Carmen y Ana Belén que dieron ánimos durante todo el recorrido y por supuesto darle el agradecimiento de parte de estos corredores populares, pues sin duda ellas también forman parte de este maravilloso mundillo del runners.
Por otro lado decir que la prueba fue ganada por el keniano Julios Chepkowony (2 horas 11 minutos 10 segundos) y la keniana Emily Chepkomy fue la vencedora en féminas (2 horas 26 minutos 53 segundos), José Carlos Hernández y Elena Espeso consiguieron mínima olímpica y Chema Martínez tuvo que abandonar la prueba en el kilómetro 28. El español de origen marroquí Abderrahman Ait Khamouch logró la mínima de participación para los Juegos Paralímpicos de Londres y ha batido la plusmarca mundial paralímpico de maratón en la categoría T46 (amputados de brazo) con un crono de 2h.25:43.
ENHORABUENA A TODOS.